En esta versión de la canción popular inglesa, el poeta Michael Rosen y la ilustradora Helen Oxenbury le siguen la pista a unos niños que salen a cazar un oso entre juegos y onomatopeyas. Juntos, atraviesan un campo de altos pastos, un profundo río y un oscuro bosque.
"La historia tiene un ritmo irresistible para los niños. Nunca lo he leído a un grupo sin que a la segunda página, y sin que nadie les diga nada, comiencen a repetirlo en voz alta. Esa relación de los niños con la palabra como sonido es algo muy bonito y este libro la despierta".
María José Ferrada
Escritora